¿Qué rutas hacer por Escocia?
Escocia es un país precioso repleto de historia y de paisajes sublimes que invitan a recorrer hasta el rincón más inhóspito. De hecho, dependiendo de tus intereses y del tiempo que dispongas, hay muchas rutas para hacer que puedes escoger. Aunque una de las más populares es, sin duda, la ruta de las Highlands. Las Tierras Altas son una mezcla de territorios salvajes que albergan construcciones históricas emblemáticas y más rincones que ver en Escocia. Aquí puedes pasar por el castillo de Eilean Donan, pasear por los alrededores del lago Ness, explorar la ciudad capital de Inverness o visitar la isla de Skye; uno de los entornos más misteriosos y mágicos que Escocia tiene para ofrecer.
El país también cuenta con una ruta de más de 2000 castillos que puedes visitar para empaparte de sus leyendas, entre los que se incluyen el castillo de Edimburgo o el castillo de Dunnottar. Y si eres un fanático del cine y del mundo mágico de Harry Potter, quizá te gustará saber que en Escocia se rodaron numerosas escenas. Por lo que, si ya estás planeando tus próximas vacaciones, te invitamos a hacer el tour de Harry Potter y los castillos ingleses desde Edimburgo.
Aun así, queda mucho más de Escocia y de las Highlands por ver y descubrir, como rutas de senderismo y ciudades importantes. Por tal motivo, hemos armado una práctica guía para explorar las Highlands escocesas. ¿Estás preparado para el viaje de tu vida? Aquí tienes todos los detalles.
Descubre la belleza de las Highlands
Las Tierras Altas de Escocia, también conocidas como Highlands, son una región montañosa situada al norte del país. Son conocidas por conservar la esencia pura escocesa y por su vegetación salvaje, la cual se tiñe de tonalidades ocres y naranjas en otoño, que termina por pintar un escenario por demás encantador.
La ciudad de Inverness es su principal centro administrativo y pertenece al concejo unitario de Highland, el más grande de la región. Pasear por las Tierras Altas de Escocia te pone en contacto prados verdes interminables, con las montañas y con la inmensidad del océano atlántico norte. Además, también tienes la oportunidad de ser testigo de Ben Nevis, la montaña más emblemática de Escocia y la elevación de mayor tamaño en Reino Unido.
Son muchas las rutas de viaje por las Highlands que puedes hacer para conocer lo mejor de las Tierras Altas de Escocia. Sin embargo, si te sientes algo perdido y no saber por dónde empezar, aquí te contamos los principales lugares para descubrirlas.
1. Lago Ness
El Ness es uno de los lagos más grandes de toda Escocia y también uno de los más famosos. Es una gran masa de agua dulce de unos 36 kilómetros de longitud y más de 200 metros de profundidad ubicado entre las montañas y prados verdes de la Tierras Altas escocesas. Debe su fama a la leyenda del monstruo Nessie; una criatura que, se presume, habita en las heladas aguas del lago Ness. Cierto o no, su leyenda atrae a miles de turistas cada año.
Y aunque ver al monstruo es algo improbable, aún puedes maravillarte con las panorámicas espectaculares que rodean al lago. Asimismo, puedes adentrarte a las ruinas del castillo de Urquhart a las orillas del lago Ness; uno de los lugares imprescindibles en las Highlands de Escocia. Y si deseas practicar algo de turismo urbano, puedes visitar algunos de los asentamientos ribereños alrededor del Ness como Fort Augustus. Por lo que, si está entre tus planes darle una visita a Nessie, te recomendamos hacer una excursión al lago Ness y las Highlands desde Edimburgo.
2. Inverness
Inverness es la ciudad capital de las Tierras Altas de Escocia. Su privilegiada ubicación le posiciona bastante cerca de otros atractivos turísticos escoceses como el lago Ness, el campo de batalla de Culloden y el castillo de Urquhart. Por ello te recomendamos hacer una excursión por el lago Ness, las Highlands e Inverness desde Edimburgo en tu próximo viaje a Reino Unido. La ciudad es importante desde la edad media e incluso jugó un papel importante en la historia de Escocia.
Hoy en día, Inverness brilla por el turismo. Su amplia oferta de alojamientos y una gastronomía bastante atractiva hacen de esta capital un lugar más que idílico. Asimismo, puedes aprovechar la ocasión para visitar el antiguo mercado victoriano, el castillo de Inverness y otros puntos de interés turístico que te pueden enamorar.
3. Isla de Skye
Popularmente conocida como ‘la isla de las Hadas’, la isla de Skye es el paisaje más apreciado y conocido de las Highlands escocesas. Destaca por sus parajes escondidos y sus panorámicas impresionantes. Ha sido la fuente de inspiración de escritores, pintores y artistas a lo largo de los años, siendo también de gran admiración para los viajeros. Es el hogar de una vasta variedad de especies vegetales y animales, de valles, castillos y acantilados.
La isla de Skye es la viva esencia de la naturaleza y paisajes en las Highlands. Aunque además de sus entornos naturales de encanto, al oeste de la isla puedes encontrarte también con el gran castillo de Dunvegan; perteneciente al clan Mac MacLeod. También puedes experimentar la adrenalina desde el acantilado Kilt Rock o saborear los mitos escoceses en el valle de las Hadas. Es posible viajar a la isla desde la capital de Escocia, así que no descartes la posibilidad de hacer un tour de 3 días a las Highlands e isla Skye desde Edimburgo.
4. Glencoe
El valle de Glencoe es un deleite para los amantes de la naturaleza y de las excursiones. Aquí convergen numerosas rutas y senderos a través de las Highlands. Se le considera una de las ubicaciones más bonitas de Escocia y basta con solo darle un vistazo para comprobarlo. Montañas de tamaño inmenso, riachuelos con cascadas y un valle tan extenso que se pierde ante la vista. Un lugar sumamente hermoso y silencioso que incluso ha sido escenario de películas.
Glencoe ha aparecido en las películas de Braveheart, Skyfall, Rob Roy, Harry Potter y el prisionero de Azkaban y muchas otras más. Asimismo, goza de parajes naturales sumamente distintivos, como la montaña Buachaille Etive Mór, las cascadas de Glen Coe o el lago Lochleven. Además, si te interesa explorar cabañas tradicionales o platillos locales, siempre puedes adentrarte a la pequeña villa de Glencoe para descansar y reponer energías para continuar con la aventura en las tierras altas de Escocia.
5. Castillo de Eilean Donan
El castillo de Eilean Donan es la edificación más famosa en las Tierras Altas de Escocia. Se alza sobre una isla pequeña homónima y le rodea un pasado histórico fascinante, numerosas leyendas y un entorno natural con vistas privilegiadas. El monumento está abierto al público durante todo el año, excepto los días cercanos a la navidad o por cierres señalados. La entrada tiene un costo de 11 libras y hay descuentos para niños y adultos mayores. Por lo que, si quieres darle una visita, consulta antes la web oficial para comprobar los horarios.
En otrora fue un baluarte contra las expediciones nórdicas. Hoy en día es la residencia oficial del clan MacRae. Eso sí, vale la pena acotar que la construcción actual es una reconstrucción moderna. De la fortaleza original, que data del siglo XIII y que fue destruida por fragatas inglesas, se conserva bastante poco. Aun así, continúa siendo uno de los castillos más impresionantes de Escocia. Dispone de un centro de visitantes, cafetería y tienda de regalos.
6. Castillo de Dunnottar
Ubicado en la costa este de Escocia, muy cerca del mar del Norte sobre la cumbre de un acantilado, se alza una fortaleza en ruinas de lo más espectacular. Se trata del castillo de Dunnottar, un monumento del siglo XIV al sur del pueblo Stonehaven que puedes visitar por un costo de 10,50 libras por persona. Cuenta con aparcamiento a pocos metros si vas en coche, aunque también puedes llegar usando el transporte público. En su portal oficial puedes consultar los horarios.
El encanto de las de ruinas de Dunnottar es su historia. En su momento actuó como un bastión defensivo construido sobre una posición estratégica. Con los años cambió varias veces de dueños, hasta que la familia Cowdray decidió restaurarlo y abrirlo al público. Ahora, a pesar de los avances de la naturaleza, los visitantes pueden acercarse y recorrer estancias como la capilla, la forja, los establos, el palacio y la bodega. Así que planifica tu viaje a las Highlands y visita este gran monumento arquitectónico. Y si estás en la capital escocesa, apúntate a un tour a los castillos de Glamis y Dunnottar desde Edimburgo para vivir una experiencia mucho más completa.
7. Stirling
Entre las ciudades de Glasgow y Edimburgo, se encuentra la pequeña ciudad de Stirling, una población construida a los pies de una colina donde se alza el castillo de Stirling. En un lugar ideal para comenzar a conocer la región de las Highlands, aunque también es un sitio que llama poderosamente atención por su palacio medieval y los encantos de su villa. Por lo que fácilmente se le puede considerar uno de los pueblos más bonitos de Escocia.
La estructura urbana de la villa se asemeja mucho a la de Edimburgo y ha sido durante siglos un jugador importante en la historia del país. Aquí se encuentra el monumento nacional a William Wallace. También puedes visitar la plaza del mercado Mercat Cross en el centro histórico de la villa o cruzar el famoso puente de Stirling. Este pequeño rincón escocés alberga variados atractivos turísticos, por lo que alojarse en la villa es uno de los mejores consejos para disfrutar al máximo de las Highlands. Así que, si planeas visitar Reino Unido, te invitamos a hacer una excursión a Stirling desde Edimburgo.
Las mejores rutas de senderismo en las Highlands escocesas
1. Hasta Ben Nevis desde Glen Nevis
Glen Nevis es un valle glaciar que se ubica a los pies de la montaña Ben Nevis. Es un territorio cercano a la ciudad de Fort William y se extiende ante la vista como un espacio verde casi infinito. Por aquí fluye también el río Nevis y complementa la imagen de un lugar tranquilo y silencioso. Es en este lugar donde puedes encontrar una de las mejores rutas de senderismo de las Highlands hacia los alrededores de una de las montañas más altas de Escocia.
El recorrido tiene más de 16 kilómetros. Puede ser un tanto difícil para los menos expertos, pues hace falta tener un buen estado físico, experiencia en montañas y un buen calzado. En el sendero cruzarás por puntos de interés como el camino Stepping Stones y apreciar las vistas de la cumbre, crestas y barrancos del Ben Nevis.
2. Circuito desde la A855 hasta Old Man of Storr
Old Man of Storr es un pináculo de piedra bastante llamativo que destaca en el paisaje natural de la isla de Skye. Su figura imponente es un gran atractivo para los turistas y suele ser un punto de visita durante el verano. De hecho, hay una ruta de senderismo desde la carretera A855 hasta esta formación rocosa tan relevante de la zona.
El recorrido de 5,69 kilómetros te lleva a través de los paisajes rocosos de la isla de Skye. Puedes ver la roca Pico de Aguja, el panorama que rodea a Old Man of Storr y disfrutar de una tranquilidad absoluta que te envuelve. Eso sí, el recorrido puede ser algo complicado, así que asegúrate de estar en buena condición física y tener la indumentaria apropiada.
3. Explorando Neist Point
De vuelta en la isla de Skye, puedes visitar Nest Point; un lugar remoto al oeste de Escocia dotado de montañas inmensas, acantilados y unas vistas al mar impresionantes. Es un punto al que le envuelve un aura mágica e inolvidable. Desde aquí puedes apreciar el oleaje y dejarte seducir por la brisa marina desatada por la fuerza del viento. Es un lugar sumamente tranquilo, alejado de las aglomeraciones de turistas, al que puedes llegar desde la D884.
La ruta resulta bastante sencilla y tiene una extensión de 5 kilómetros. Es apta para todos los niveles de condición física y es de fácil acceso. En el camino puedes pasar por las escaleras de descenso y ascenso mientras obtienes un primer vistazo del paisaje que te espera. Ya en la cima te encontrarás de pleno con el faro de Neist Point y las vistas espectaculares del mar. Una experiencia singular para vivir en Escocia.
4. Circuito por el viaducto Glenfinnan
El viaducto Glenfinnan de Fort William es bastante conocido entre los fanáticos de Harry Potter, pues por aquí pasa el famoso tren que lleva al colegio de magia y hechicería de Hogwarts. Existe una ruta de senderismo que te puede llevar a vivir una experiencia bastante cercana. Se trata de un circuito de 3,65 kilómetros de dificultad moderada que te llevará muy cerca del famoso tren.
La ruta te lleva a través de paisajes impresionantes como el lago Loch Shiel, donde puedes admirar su fondo montañoso desde la orilla. Unos kilómetros más adelante llegarás al famoso viaducto de Glenfinnan. Si tienes suerte, incluso podrás ver el tren haciendo su recorrido habitual. De aquí pasarás por un camino cercano que rodea las vías ferroviarias y desde donde podrás apreciar los paisajes que cubren este lugar lleno de magia.
¿Qué visitar en Edimburgo? Lo mejor de la capital escocesa
1. Castillo de Edimburgo
El castillo de Edimburgo es una de las fortalezas más emblemáticas de la capital escocesa. Cada año recibe a más de un millón de visitantes a conocer el corazón de la ciudad. Se ubica en la cima de una colina y le protegen acantilados escarpados, dejando una única vía de acceso a través de la avenida más concurrida de la capital, la Royal Mile. Es una edificación inmensa, que requiere de varias horas para verla por completo. Por eso te recomendamos realizar una visita guiada al castillo de Edimburgo para no perderte de nada en tu visita.
En su interior se exponen los Honores de Escocia; los atributos reales más antiguos de la cristiandad, además de la Piedra del Destino; un símbolo muy valioso para Escocia. Asimismo, muy cerca de allí está la capilla de Santa Margarita, uno de los edificios más antiguos de la ciudad. Como puedes ver, es un lugar con mucho para ofrecer en una de las ciudades más visitadas de Escocia. Y si quieres sentirte parte de su gente, ¡súmate a la tradición del cañón de la una en punto!
2. Palacio de Holyrood
En la ciudad de Edimburgo también puedes toparte con el palacio de Holyrood, una joya de la arquitectura clásica escocesa que se sitúa en uno de los extremos de la avenida Royal Mile. Hoy en día es uno de los palacios más admirados del país. La decoración del palacio es sinónimo de riquezas y lujo. La mezcla de los muebles, tapices y retratos reales hacen de la visita un espectáculo sin ningún tipo de reservas.
Una de sus salas más emblemáticas es la Great Gallery, un salón de 44 metros de longitud que alberga 96 retratos de miembros de la dinastía. Asimismo, puedes visitar la abadía agustina de Holyrood; edificación del siglo XII ubicada en los terrenos del palacio. Y si deseas conocer lugares cercanos, puedes acercarte al museo nacional de Escocia o al parlamento escocés. Así que consigue tus entradas para el palacio de Holyrood y prepárate para conocer lo mejor de la capital.
3. Calton Hill
Calton Hill es la colina más famosa de Edimburgo y uno de los lugares imprescindibles que visitar en Escocia. Brinda unas vistas espectaculares de la ciudad y se encuentra muy cerca del centro de la capital. Sobre la misma se alzan diferentes monumentos de estilo neoclásico que forman parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Un lugar histórico el cual ver durante una visita guiada por Edimburgo.
En la cima de Calton Hill, además de obtener unas vistas panorámicas irresistibles, puedes visitar el Monumento Nacional de Escocia; construcción del siglo XIX que homenajea a los soldados caídos en las guerras napoleónicas, el monumento al filósofo escocés Dugald Stewart, el observatorio de la ciudad y una torre de 32 metros de altura conocida como ‘Monumento a Nelson’, a la cual puedes subir y sentirte en las nubes.
4. Catedral de Saint Giles
Levantada sobre un antiguo santuario del siglo IX se encuentra la catedral de Saint Giles, en plena Royal Mile, muy cerca del castillo de Edimburgo y del palacio de Holyrood. La construcción ha sido sometida a numerosas reformas. Por tal motivo, se pueden apreciar toques arquitectónicos de diferentes épocas. En su interior destacan distintos colores y texturas que le aportan una esencia bastante particular. Además, sus vidrieras son una parte importante de su atractivo.
Dentro de la catedral puedes ver la estatua de John Knox; importante figura en la historia de Escocia y también la capilla del Cardo; elegante edificación de estilo gótico bastante peculiar y acogedora. Además, si te queda algo de tiempo puedes apuntarte al tour de los fantasmas de Edimburgo, una ruta a través de los rincones más misteriosos y paranormales de la capital. Y si te gusta la magia, también puedes hacer la ruta de Harry Potter por Edimburgo.
Viajar por Escocia: lo que no te puedes perder
1. Glasgow
Glasgow es una ciudad de cultura. Es la cuna de numerosos artistas e inventores y alberga algunos de los museos de categoría mundial más visitados en Gran Bretaña. Destaca por sus parques, por su arquitectura y la música. Un lugar idóneo para los fanáticos del arte que buscan dejarse conquistar por el encanto de un ambiente moderno y cosmopolita.
El Riverside museum, la gallery of Modern Art e inmensa catedral de Glasgow son algunos de los principales atractivos que ofrece la ciudad. Adéntrate a su Necropolis; un cementerio victoriano con tumbas que son obras de arte fascinantes. Puedes también visitar la universidad de Glasgow; una de las más antiguas del Reino Unido. Incluso puedes pasar la tarde cerca del Clyde River y relajarte con las vistas. La ciudad tiene muchos lugares interesantes que visitar, así que no dudes en quedarte por varios días.
2. Islay
La isla de Islay ofrece al visitante ambientes costeros espectaculares junto con una fauna exótica. Se le conoce por ser un ejemplar de naturaleza y paisajes asombrosos en Escocia. Aunque también es ampliamente conocida por su elaboración de whiskies ahumados de turba. De hecho, ¡la destilería es el arte de la isla! Por lo tanto, es una oportunidad ideal para conocer la magia tras este proceso con aromas salinos y marítimos muy pronunciados.
Su historia con el whisky se remonta al siglo XIV. Hoy en día la isla cuenta con nueve destilerías activas. En tu viaje puedes visitar a la destilería de Ardberg, la destilería de Bruichladdich, o realizar una espectacular excursión a las destilerías Dewar's y Glenturret desde Edimburgo. Un dato curioso es que el 90% de su población activa trabaja en la producción de Whisky y el turismo se centra mayormente en este aspecto. Aunque también hay otros rincones naturales para ver, como la playa de Machir o la bahía de Lagavulin.
3. Aberdeen
La tercera ciudad más grande Escocia es Aberdeen, un destino en el que, se dice, sirve el mejor pescado con patatas fritas (¡el famoso 'fish and chips'!) del país. Y es que la población tiene una fuerte conexión con el mar del Norte. Está rodeada por ríos y montañas, además que su puerto es bastante activo. De hecho, uno de los puntos turísticos más interesantes que hay es la playa y zona recreativa de Aberdeen. Aunque si te interesa la arquitectura, siempre puedes acercarte a la catedral de Saint Machar.
Puedes llegar a Aberdeen desde Glasgow o Edimburgo. También puedes llegar en coche, aunque el trayecto desde la capital toma casi tres horas. En la ciudad proliferan los museos, los restaurantes, bares y teatros. Por lo que siempre vas a encontrar algo distinto que hacer. Desde admirar sus edificios de los siglos XV y XIX o disfrutar sus entornos naturales. ¡Tú decides!
Escocia es un país rico en atractivos naturales y arquitectónicos. Desde los rincones increíbles que ver cerca de Edimburgo hasta los paisajes salvajes de las Tierras Altas. Así que, si te ha llamado la atención, no dudes en dedicarle tus próximas vacaciones. Y si además has quedado con las ganas de conocer más sobre el norte de Escocia, te invitamos a una excursión a Oban y las Highlands desde Edimburgo.
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