Rodar por lo más auténtico de Andalucía
Salgas con tu grupo motero o en solitario, estas rutas están hechas para auténticos disfrutones de las 2 ruedas. El sol acompaña casi todos los días del año en esta Comunidad. En otoño e invierno los rayos aún calientan para dar salida a riders que buscan sumar kilómetros por los mejores rincones, pueblos y gastronomía de Andalucía. ¿Listo para darle gas?
1. RUTA por los pueblos blancos de Málaga y Cádiz
Rodaje de unos 350 km
Arranca con uno de los clásicos en las rutas moteras. Empieza por un paisaje que despunta en esta tierra malagueña, el Valle de Abdalajís y el Chorro. Aquí la parada obligatoria es El Caminito del Rey, un entorno de rutas y senderos por desfiladeros alucinantes. Continúa por Ronda, y sin pensarlo, aparcarás la moto para cruzar a pie el Puente Nuevo y la antigua medina andalusí.
A tantos artistas, literarios y riders ha cautivado este último pueblo como lo hará el siguiente: Grazalema. Las curvas por el Parque Natural de la Sierra de Grazalema son las mejores de la provincia. Una parada para almorzar su queso payoyo y continuar hasta Jerez de la Frontera, donde el vino, sus monumentos, el paso elegante de los caballos y el circuito de alta velocidad puede que te inviten a quedarte alguna noche.
2. RUTA por Sierra Morena
Rodaje de unos 350 km
Empieza desde Sevilla demostrando tu pasión por las dos ruedas. La hermana de Roma, la otra ciudad eterna, es perfecta para recorrerla en moto bajo el sol que calienta un día de otoño. Una vez hayas pasado por la Reserva del Castillo de las Guardas, continúa hasta llegar a un paisaje lunar, ¡lo comprobarás!
Minas de Rio Tinto
Te verás obligado a echar el freno y comprobar que no te has pasado de kilómetros y has llegado a Marte o la Luna. Este territorio minero es de lo más singular que hallarás en la ruta. No te vayas sin explorar su río rojo, el Tinto.
Gruta de las Maravillas
Después de carreteras disfrutonas por el Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, es importante hacer parada para visitar este rincón inimaginable y probar en uno de los pueblos de la ruta la chacina de cerdo ibérico, las setas en temporada y el queso. Por cierto, el queso es su mayor secreto.
Parque Natural Sierra Norte de Sevilla
Dejando atrás la Sierra Norte, comienza a rodearte un paisaje llano de alcornoques y dehesas. Antes de arribar a Peñarroya-Pueblo Nuevo, ya en tierras de Córdoba, bájate de la moto en Cazalla de la Sierra, un pueblo con mucha historia que merecerá tu curiosidad y, si te quedas, degusta su licor de guindas o su exquisito anís.
3. RUTA legado arquitectónico y artístico
Rodaje de unos 365 km
Suma kilómetros y conoce joyas arquitectónicas que son el legado de las mayores Civilizaciones del Mediterráneo. Antes de darle gas hasta la ciudad califal de Córdoba, descubre el barrio francés de Peñarroya-Pueblo Nuevo. Es sorprendente la influencia gala en la arquitectura de este pueblo minero.
Y aunque los clubs moteros ya te habrán contado sobre la mezquita, la judería y el salmorejo cordobés, nada tiene que ver admirarlo con tus propios ojos y paladar. Continúa sumando estilos como el renacimiento y el barroco en destinos Patrimonio Mundial como Baeza y Úbeda. Y alcanza la meta de esta ruta en la Alhambra de Granada, la ciudad fortificada de los palacios y las reminiscencias andalusíes, del flamenco y la gastronomía andaluza.
4. RUTA por la falda de Sierra Nevada
Rodaje de unos 200 km
El acceso al macizo de Sierra Nevada debe ser por Lanjarón, la puerta de entrada occidental de la Alpujarra granadina. Un fiel ejemplo de cómo los pueblos de la zona se construyeron abrazados a la montaña.
Prueba como tu segunda piel asciende entre curvas sinuosas y alcanza el aire fresco que se respira a los pies del Mulhacén, en uno de los pueblos más altos de España: Trevélez. Puedes volver a Granada para hacer la ruta circular o continuar hasta la Alpujarra almeriense y llegar a Laujar de Andarax. Para reponer fuerzas en la montaña como un auténtico alpujarreño, en cada pueblo debes probar su delicia gastronómica, en numerosos casos bajo Denominación de Origen Protegida, que bien puede ser jamón, queso, miel o mermelada.
5. RUTA del interior a la costa de Almería
Rodaje de unos 160 km
De la Alpujarra almeriense, y de cómo el viento y las curvas de montaña mecen tu cuerpo como si de una antigua cuna de madera se tratara, pasas a comprobar la cilindrada de tu moto en un terreno árido y desolado, a modo de un disparo de bala de un revólver. En el asombroso desierto de Tabernas las cámaras no son radares, sino producciones de cine western.
Dejando atrás los badlands del desierto, continúa por un territorio geológicamente sorprendente: Sorbas. Para llegar al Mediterráneo y perseguir los cantos de sirenas, desciende trazando un escenario de curvas y fondo azul que llega a los mejores rincones del Geoparque Natural de Cabo de Gata- Níjar : las Salinas, el Campillo de Gata, Cala Raja, el Arrecife del Dedo, Punta Baja, San Miguel y San José.
Escapadas moteras más conocidas por los riders
Costa de Cádiz
Deja la autovía para más intimidad... y persigue las puestas de sol en las playas de El Palmar, Caños de Meca, Bolonia y Tarifa. No olvides parar en Barbate para deleitarte con su joya gastronómica: atún rojo salvaje de la Almadraba.
Carretera de la Cabra
La A-4050. Famosísima por sus apabullantes paisajes y el serpenteante puerto del Suspiro del Moro, para descender hasta la Costa Tropical de Granada. Cualquier rider diría que es parada obligada el puerto de la Cabra, ¡vaya vistas!
Ruta 66
Un rodaje suave que suma kilómetros por el norte de la provincia de Sevilla. Disfrutón por los paisajes variopintos que ofrece y la parada en alguna pedanía sevillana, enclaves de gran valor, pero poco conocidos, como Torre de la Reina.
Ruta por el Desierto de Tabernas y Sierra de los Filabres
¿Has oído hablar de cómo se puede rasgar el cielo desde Calar Alto? Tendrás que subir esta sierra de Filabres, dirección norte por la AL-3102, para que su espectacular panorámica hable por sí misma. En dirección a la A-1178, y antes de regresar a Tabernas, atraviesas pueblos como Velefique, Bacares, Serón o Gérgal, rincones que te hacen dudar si el tiempo ha podido olvidarse de pasar por estas carreteras.
Sierra de las Nieves y Valle del Genal
Exige lo mejor de tu conducción. Las curvas y los desniveles de este parque nacional exigen lo mejor de ti como rider. A su vez te recompensa con sus paisajes de bosques de pinsapos y alcornoques, especialmente en otoño por sus colores, y con su gastronomía de temporada.
Trassierra de Córdoba
Un rincón de agua e historia oculto para el viajero, excepto para quienes saben conducir hasta él. Desde Córdoba hay que alcanzar Almodóvar del Río y buscar Hornachuelos. Ascender por la CO-5314 y continuar por la A-3075 hasta encontrar la sorpresa califal: Santa María de Trassierra. ¡Lo tienes!
Ruta circular Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas
Hecha para la moto. Carreteras que bordean un entorno único de bosques y quebradas, donde te peina el viento de la sierra, te cubre el olor a resina y te empapa el sonido del agua. Conquista el puerto de las Palomas hasta el embalse de Tranco. Después de resistirte (o no) a un baño en el embalse, sigue hasta subir la desconocida Sierra de las Villas y desciende al embalse de Aguascebas.
Ruta por la costa de Huelva
De Matalascañas a Ayamonte. Más conocida por clubs de moteros como la ruta de la luz. Revela la belleza y la historia de los pueblos pesqueros y sabores marinos en 150 km de carreteras abiertas y placenteras. Después de perseguir la luz por la costa virgen de Doñana, Mazagón y el monasterio de la Rábida, el Atlántico tiene reservado el mejor final para esta ruta onubense: los últimos rayos de luz coloreando intensamente el océano y la costa en El Rompido.
