15 preciosos pueblos cerca de Alicante

Nuestro recorrido empieza por Villajoyosa, cuyo nombre viene a decir “ciudad alegre” y, además de alegre, es uno de los pueblos bonitos cerca de Alicante que te recomendamos al visitar la Costa Blanca. Es una villa de pescadores ideal para disfrutar de una escapada tranquila, a lo largo de sus 15 kilómetros de costa y playas de película como la playa L’Esparrelló o la cala Racó del Conill. Y después de la playa, date un paseo por el casco antiguo de Villajoyosa, donde sus fachadas de colores te sacarán una sonrisa y descubrirás algún que otro monumento fascinante. Si vas en verano, ¡no te pierdas las famosas fiestas de moros y cristianos de Villajoyosa! O, si no duermes en el pueblo, conócelo con esta excursión a Villajoyosa y Altea desde Alicante.

Rojales es un pueblo que ver en Alicante y alrededores con muchísimo atractivo. En primer lugar, está bañado por el río Segura, y los habitantes de la zona se han abastecido de sus aguas siempre, por esto ahora puedes visitar el conjunto monumental hidraúlico urbano, en el centro del pueblo, y conocer cómo se ha aprovechado el poder del río. Luego, Rojales alberga uno de los rincones más sorprendentes de la provincia de Alicante: se trata de las cuevas del rodeo, Rojales tiene viviendas subterráneas, excavadas por mineros entre los siglos XVIII y principios XX, y que se han rehabilitado como punto de interés turístico, con razón, pues es una parada imprescindible de este entrañable pueblo.

Uno de los nombres que escucharás siempre cuando se habla de la Costa Blanca, y entendemos por qué. Torrevieja queda a poco más de 40 kilómetros de Alicante y se trata de una localidad que desde el siglo XIX (cuando solo contaba con una torre vigía, la torre vieja) ha crecido hasta convertirse en una joya del Mediterráneo. Torrevieja cuenta con uno de los mejores parques naturales de la Comunidad Valenciana, hablamos de las salinas de Torrevieja, las más productivas de Europa, y junto a ellas la laguna rosa, única en España. ¡Únicas también sus playas, así que pásate por la playa de Los Locos o la playa de la Mata!

Al igual que Torrevieja, Villena se encuentra a poco menos de una hora de Alicante, y es un pueblo con una historia envidiable. Entre sus principales atracciones se encuentra el Castillo de la Atalaya, construido en el siglo XII por los árabes que habitaban el territorio entonces y con varias reformas que evidencian el paso del tiempo y de la historia. Pero, si de reliquias hablamos, el tesoro de Villena es parada obligatoria al visitar este pueblo. Son un conjunto de piezas de oro, hierro, plata y ámbar de 3000 años de antigüedad; ¡este hallazgo se considera uno de los más importantes de Europa! Lo puedes visitar en el Museo Arqueológico Jose María Soler.

El Campello es una parada excelente para quienes buscan qué visitar en la provincia de Alicante. Este pueblo tiene 23 kilómetros de costa y de playas reconocidas por su buen estado, lo que lo hace un destino genial para viajes familiares o de ocio. A los usuarios de minube les encantan la playa del Carrer la Mar o la playa de Muchavista. Luego, ofrece hermosos monumentos como la Torre Illeta o la Iglesia Parroquial de Santa Teresa. Pasar por El Campello es pasar por uno de los pueblos más completos de la Costa Blanca, con actividades para cualquier tipo de viaje, sin duda, imperdible.

Santa Pola se encuentra a menos de media hora de Alicante y es una parada genial para conocer esta provincia valenciana en familia. En primer lugar, cuenta con dos geniales parques temáticos de la Comunidad Valenciana: con 24000 m2 de extensión, el parque de atracciones Pola Park es el sitio para disfrutar a tope. Luego, para bajar el subidón de la adrenalina, puedes visitar el  parque natural de las salinas, precioso para apreciar uno de los magníficos atardeceres de Santa Pola. Para terminar el paseo, no dejes de darte un baño en playa Lisa, perfecta para jóvenes y mayores por su poca profundidad. Conoce Santa Pola, un pueblo excelente para recorrer Alicante con niños o para pasar el día con una excursión a Elche y Santa Pola desde Alicante.

Almoradí se presenta como una parada muy acogedora de la provincia de Alicante que visitar para adentrarse un poco en la cultura de la zona. En Almoradí puedes conocer la iglesia de San Andrés, construida a comienzos del siglo XIX, luego de que un terremoto arrasara con gran parte del patrimonio histórico del pueblo. Luego, edificios como el casino o el Teatro Cortés, pero, sin duda, en Almoradí debes conocer el ecomuseo de Almoradí: situado a las afueras, es un centro dedicado a difundir la cultura, historia y costumbres de los habitantes de la zona que han dedicado su vida al trabajo de las huertas y de la tierra. Y ya que hablamos de huertas, no te vayas de Almoradí sin probar sus deliciosas alcachofas, pues este pueblo es el mayor centro alcachofero de España.

Orihuela es uno de los pueblos cerca de Alicante con playa que no puedes dejar fuera al planear un recorrido por la Costa Blanca. Se trata de uno de los pueblos más importantes para la Comunidad Valenciana. Llegó a ser la capital del Reino de Valencia durante el gobierno de Felipe V, y desde entonces su historia no ha hecho sino crecer. Orihuela tiene una gran riqueza monumental, natural y cultural, por eso te recomendamos monumentos como la Catedral de Orihuela o el espectacular Colegio Diocesano Santo Domingo, construido en el siglo XVI; lugares emblemáticos como la casa museo de Miguel Hernández, poeta de los más importantes de la España del siglo XX; o una de las 11 playas que ocupan sus 16 kilómetros de costa, el Cabo Roig.

Crevillent se encuentra a poco más de media hora de Alicante, y tiene una genial oferta de cosas que ver cerca de Alicante. Por la ciudad puedes acercarte al casco antiguo de Crevillent y conocer un poco su historia, pero por lo que este pueblo destaca es por su entorno natural. Sube a la Sierra de Crevillente para disfrutar de unas vistas alucinantes de, incluso, ¡Murcia o Granada! Y es que la posición privilegiada de esta sierra te permite ver hasta 100 kilómetros a la redonda, una verdadera pasada. Luego, visita el parque natural El Hondo, catalogado como una de las zonas húmedas más importantes de Valencia, un parque que, además, destaca por su biodiversidad y hermosos paisajes. Visita Crevillent y disfruta de unas vacaciones en Alicante llenas de color y naturaleza.

Sax se caracteriza por tener un largo recorrido histórico, pues ha sido cruce de caminos desde hace cientos de años. Fue atravesado por vías romanas, rutas cristianas y caminos árabes, ahora, ayuda a comunicar la costa con las montañas. Si te preguntas qué ver en Sax, lo principal es su castillo. El Castillo de Sax es una estructura del siglo XII que se ubica en lo alto del pueblo, pero, ya un poco más abajo, encontrarás el casco antiguo de Sax, un recorrido que vale mucho la pena para conocer el pueblo y su curiosa fisonomía.

Guardamar es un destino súper completo y se encuentra a apenas 45 minutos de Alicante. Allí encontrarás monumentos como el Castillo de Guardamar, que data del siglo XII y, aunque ahora se conservan algunas ruinas, la muralla que lo rodea se mantiene, lo que genera un acercamiento a la antigüedad y orígenes de Guardamar. Después, no te pierdas su naturaleza pues Guardamar está lleno de rincones como el parque de las Dunas o sus incontables playas. Y para comer, este pueblo destaca por su gastronomía y celebra cada junio la Semana Gastronómica de la ‘Nyora i el Llagostí’, donde ñora y langostino son protagonistas, así que no te pierdas un pueblo excelente donde comer cerca de Alicante.

Petrer es similar a Guardamar, pues tiene una oferta turística bastante amplia y para todos los públicos. Desde monumentos como el Castillo de Petrer o las casas cueva de Petrer, hasta centros como el museo arqueológico y etnológico Dámaso Navarro. Eso si quieres visitar por tu cuenta, pero te recomendamos aprovechar sus eventos, como las rutas que recorren el pueblo, por ejemplo, la ruta histórica, que recorre monumentos, plazas o iglesias; o una ruta nocturna donde prima el entretenimiento y la dramatización de historias que te transportarán a la vida en este pueblo, ¡hace más de 1500 años! Todo esto y el que está a menos de 40 minutos de Alicante, convierten a Petrer en un destino excelente donde dormir en Alicante y descubrir la provincia. Por si acaso, te dejamos unas cuantas ideas de alojamiento en esta lista de los mejores hoteles con vistas al mar en Alicante.

Novelda es una localidad del interior de la provincia de Alicante, con muchísimo encanto y riqueza histórica, un buen destino para pasar un día sin alejarte mucho de la ciudad. Te proponemos acercarte al santuario de Santa María Magdalena, al Castillo de la Mola y el centro cultural Gómez Tortosa, tres ejemplos de la esencia modernista que caracteriza a este pueblo. Pero no te quedes ahí, piérdete por las calles de su casco antiguo y, si tienes ganas de aventura, puedes realizar alguna ruta de senderismo en los parajes naturales a su alrededor, como la sierra del Cid.

Biar se encuentra a 650 metros sobre el nivel del mar, enmarcado en la sierra Mariola, te dejará sin aliento. Su imponente castillo se ubica en un cerro a 750 metros de altitud, y, sorprendentemente, conserva la misma estructura que cuando fue construido en el siglo XII. Llegar al Castillo de Biar es una aventura de por sí, pues debes recorrer las estrechas calles del pueblo, es decir que, mientras llegas al castillo te haces al pueblo y, ¿quién sabe? Tal vez un vecino te cuente un pedacito de historia. También te recomendamos visitar el santuario de la Virgen de Gracia y realizar alguna de las rutas de corto recorrido a las que puedes acceder desde el propio casco urbano.

Otro nombre muy sonado y la última parada de este recorrido. Alcoy se encuentra a casi una hora de Alicante y es una de las localidades más importantes de la provincia. Tal como empezamos este viaje alicantino, terminamos en una ciudad donde no puedes perderte las fiestas de moros y cristianos, y es que Alcoy es la cuna de esta celebración. Alcoy tiene un gran patrimonio natural e histórico, vale mucho la pena acercarse al parque natural de la Fuente Roja para disfrutar de sus vistas; o aprovechar las rutas urbanas para conocer lugares emblemáticos como la Casa del Pavo, a ver si descubres sus curiosas esculturas.