Descubre las calas ocultas de Melilla y sus alrededores
Las calas ocultas de Melilla son auténticos tesoros que invitan a explorar la costa. Entre ellas destaca la cala del El Faro, un rincón tranquilo rodeado de naturaleza que ofrece aguas cristalinas perfectas para nadar. Otra opción es la cala de La Hoya, ideal para el buceo, donde se puede apreciar la rica vida marina. También se encuentran pequeñas calas en los alrededores, como aquellas cerca del Parque Natural de las Marismas, que brindan un acceso a playas menos concurridas y una experiencia más íntima con la belleza del paisaje. Estos espacios son perfectos para quienes buscan escapar del bullicio y disfrutar de un día relajante en la naturaleza.
Las playas de Melilla son un verdadero refugio que combina naturaleza, historia y tranquilidad. Desde la emblemática playa de la Alcazaba hasta las calas ocultas y la playa de la Hípicalist, cada rincón ofrece una experiencia única. Explorar estos espacios es sumergirse en la belleza de un litoral que sorprende en cada ola, creando recuerdos imborrables para quienes lo visitan.