Vintage Hotel & Lounge Cap Sa Sal

Este hotel es una auténtica joya, escondido entre la naturaleza abrupta de la Costa Brava, junto a Begur.

El hotel está situado en un acantilado sobre el mar, y está perfectamente integrado en la naturaleza. Todo mira al mar.

Las habitaciones son muy coquetas y románticas. Da la sensación de estar en una pequeña cabaña perdida en la montaña. Hay tv, una cama super cómoda, escritorio y baño completo. En la entrada de cada habitación una terracita donde relajarse y disfrutar del mar, la brisa y el profundo relax que se contagia.

Los huéspedes tienen acceso libre a una piscina integrada en las rocas junto al mar, una auténtica maravilla.

Paisajes incomparables, el restaurante de calidad excelente, platos exquisitos y servicio magnífico, muy atentos y amables, recomendadisimo, habitación con vistas increíbles al mar, todo muy limpio y al detalle.. seguro que volvemos!

Un auténtico timo, con precios abusivos, mal servicio que raya la grosería y muy mala calidad de lo que ofrecen. Vive únicamente del precioso paraje donde está instalado, pero como digo no es un lugar nada recomendable por su lamentable servicio de hostelería. Mejor abstenerse de ir.