Impresionante y ensordecedora caída de agua
A unos 20 kilómetros de Interlaken se encuentran estas cascadas que recogen el agua de las paredes de los glaciares de los imponentes Jungfraujoch, Eiger y Mönch.
Es un espectáculo impresionante y ensordecedor observar cómo el agua cae con una fuerza descomunal formando distintas pozas desde las que continúa su caída hasta llegar al río.
En su camino, la fuerza del agua es tal que veréis la roca del monte totalmente erosionada, según el agua la ha ido modelando.
La entrada cuesta unos 12 francos. El camino hasta la cascada más alta lo podéis hacer andando o tomando un elevador que sube con un impresionante desnivel por un túnel escarvado en el monte.