Al rico calor termal
Ya sabían los romanos, que eran muy listos, que esta zona era abundante en calores geotérmicos, y pronto pudieron constatar los beneficios de las aguas termales que por aquí surgían a la superficie. Por eso decidieron convertirla en centro del termalismo romano en la zona. Levantaron para ello una construcción termal que data de la fabulosa época del Imperio, es decir entre el siglo I antes de Cristo y el I después de Cristo.
Constan de una gran piscina cubierta rodeadas de varias galerías que se mantienen gracias a arcos de medio punto que recientemente han sido restauradas al ser Bien Cultural de Interés Nacional.