Shibuya

Si piensas en Tokyo, seguramente que una de las primeras imágenes que te viene a la cabeza es la del cruce de Shibuya, el de mayor tráfico de peatones del mundo con sus pasos de cebra en diagonal.

Aparte del cruce y los alrededores de la estación de Shibuya, donde esperará siempre a su dueño el mítico perrito Hachiko, merece la pena perderse un poco por los alrededores

Toda una experiencia dar un paseo por este barrio y sumergirse en la marea humana que lo puebla. Merece la pena dedicarle una vuelta a toda la zona, no demasiado grande y sencillamente dejarse llevar por el maremagnum de personas, hipnotizarse con los mil carteles de infinitos colores, quedarse sordo con el ruido ensordecedor de la publicidad, la gente, los coches, entrar en cualquiera de sus mil tiendas y restaurantes, observar a la estilista juventud japonesa lucir palmito y originalidad por las calles, ver los comercios que venden cualquier cosa y de cualquier manera, adentrarse en un Pachinko (tragaperras japonesas) de varias plantas aderezados de un ruido insoportable, sorprenderse viendo como la gente solo fuma por la calle en zonas habilitadas para ello..

Si le dices el cruce de Shibuya a alguien puede que te mire enrarecido y de que no sepa de que hablas, pero si le dices que es el famoso cruce que sale en películas con cinco paso de peatones y que pasan millones de personas al día te dirá, AH ESE!!

Pues aquí nos encontramos por un día siendo uno más de esos millones, disfrutando de los diferentes pasos de peatones, intentando hacer una espontánea que sea digna de nuestras paredes de la casa y vimos el movimiento de la gente aleatoria sin apenas ruido (algo de lo que no tardaremos de acostumbrarnos en Japón y luego echaríamos de menos en nuestro país).

Uno de los distritos más conocidos de Tokyo por su ruido, marcha y movimiento. Está plagado de gente joven que va para allá a comprarse su ropa y salir de marcha. Una zona que tiene que estar en tu agenda sin falta si visitas la ciudad. Te asombrará el jaleo, la gente y hasta los pasos de cebra.

Empieza por el famoso cruce con pasos de cebra oblicuos por el que cada día pasan miles de personas. Crúzalo. Vuélvelo a cruzar. Saca tu cámara y haz un vídeo. ¿Por qué no? Pocas veces verás esa cantidad de gente bailando al mismo son, siguiendo un compás perfecto.

Una vez lo hayas probado, sumérgete en el barrio de Shibuya: luces de neón, mil colores, gente por todos los lados, tiendas y más tiendas, ruido, música, anuncios por los altavoces... Te parecerá una locura. Y sí, lo es. Pero una locura que a mi me pareció fascinante. Yo lo hice de noche, y quizás por eso el efecto se multiplica.

Como no conseguir inspiración en un lugar tan maravilloso y brillante como lo es el distrito de Shibuya en Tokyo, Japon!
Luces brillantes, avalanchas de gente y cultura que se respira.
Shibuya es el centro de las tendencias y de la moda mundial, donde todo el mundo va en busca de inspiración. Eso lo aprendí una vez estando allí, nunca pensé que podía existir un lugar así en el mundo.
No se dan muchas veces en la vida oportunidades en las que uno se siente dentro de una película, por eso al darse la oportunidad, hay que aprovecharla.