Iglesia de Santo Domingo

La Iglesia de Santo Domingo es la más antigua de la ciudad, pues fueron precisamente los dominicos la primera comunidad religiosa que se instaló en la ciudad. El convento dominico fue fundado en 1423 por el Infante D. Pedro, cuy blasón puede verse en la fachada.

Sus orígenes se remontan al siglo XV, aunque de esta época solo se conserva una pared, que tiene incrustada una Virgen gótica. Fue reconstruida en el siglo XVIII en estilo barroco, aunque en ella pueden encontrarse diferentes estilos arquitectónicos, como el Manierismo de sus capillas laterales, el Barroco del coro alto, o el Modernismo del presbiterio.

El edificio, de una sola planta con forma de cruz latina, fue ampliado en el siglo XX con una estructura de acero y hormigón y las paredes se recubren para evitar las reverberaciones. En el nuevo transepto se construye un altar modernista con una cúpula de yeso perteneciente al “Art Nouveau”.

Se consagró al culto en 1464 pero ha sufrido numerosas rehabilitaciones que han influido negativamente en su aspecto actual. Es una catedral demasiado moderna y fría.

La mayor parte de las veces se nos pasan inadvertidos los cruceiros que las iglesias gallegas o de aquí se erigen a las puertas de las iglesias.

Este frente a la entrada a la catedral Nuestra señora de Gloria es muy valioso, el Cruceiro de Santo Domingo es de estilo gótico, y dispuesto sobre un capitel octogonal.

La cruz es fruto de una laboriosa obra de cantería y se halla coronada por una flor de lis.

Muy bonita. Mezcla el estilo barroco con la modernidad de su órgano, por ejemplo.

Probablemente la más representativa.