Un lugar donde refugiarse
Uno de los más bellos parques naturales de Cataluña. El gran observador de mi ciudad Terrassa, siempre que viajo y vuelvo a casa, desde muy lejos incluso aterrizando al aeropuerto del Prat, puedo ver a lo lejos la cima de Sant Llorenç del Munt y es cuando siento "ya estoy en casa".
Uno de los lugares más bellos, donde poder pasear, sentir su naturaleza en estado puro, sus caminos, sus cuevas y sus espectaculares vistas. Una vez llegas a la cima, sientes una inmensa paz y bienestar.
En su cima, encontramos un monasterio románico construido entre finales del siglo XIX y mediados del XX. Una espectacular construcción religiosa catalana del románico, donde el viajero puedo contemplar en la actualidad su estado natural.