La llegada de los primeros tres...
La llegada de los primeros tres hermanos lasallanos a Rosario, fue en el año 1907 y llegaron a la Parroquia de la Inmaculada Concepción, crearon una escuela en el barrio de la refinería que actualmente es el colegio Boneo. Estuvieron allí hasta el año 1937 y también estaban en este lugar ya que por 1911 un señor donó gran parte del colegio en memoria de su esposa. Esta comunidad, a pesar de haberse retirado los hermanos por unos años, ya que actualmente ha retomado la dirección del Colegio, siempre e basaron en la doctrina y los principios de Bautista de La Salle que era la educación y cuidado de los niños y adolescentes pobres, teniendo siempre en cuenta sus innumerables necesidades. Originariamente de varones ya hace unos cuantos años es mixta en los tres niveles de enseñanza. Con motivo de cumplirse en 2007 el centenario de la congregación en la ciudad, se recurrió al arcón de los recuerdos” de ex alumnos de diversas edades, ingresados en 1932, otros en 1965 y otros más recientes. Por los más antiguos supimos que el colegio estaba todo en un mismo edificio, al que se enraba por calle 1º de mayo por una puerta muy chiquita y que la reja que hoy separa el patio del primario y el secundario estaba llenos de árboles que daban sombra. Una sombra muy bien aprovechada cundo al tocar la campana de salida, corrían a ver quien llegaba para ocupar la canchita de tierra y jugar un partido de fútbol. En esa época el colegio tenían doble turno por lo que se hacía muy largo, era una sencilla construcción de ladrillos y su piso no estaba embaldosado. Los hermanos, que eran muy buenos y compañeros, casi hasta compinches con los alumnos, tenían sus cuartos que daban a calle Mendoza al igual que los pupilos que había en esa época y todos comían juntos, los hermanos, los pupilos y los que viviendo lejos se quedaban a comer en el colegio. Dicen que el hermano que hacía de cocinero, le hizo creer a uno de los alumnos que había comido gato por liebre, en medio de las mudas risas de todos, y el pobre casi muere del susto. Cuentan que lo pasaban muy bien y que fueron los mejores años de su vida.