Ruinas de Ongi

Se trata de una congregación budista en medio del desierto del Gobi, que en los años 40 los soviéticos decidieron que no debían seguir allí. Así que destruyeron gran parte de los templos e instalaciones y a los monjes los arrestaron y llevaron a Siberia…

Bestialidades políticas aparte, el lugar es curioso de ver por el paraje donde se encuentra, en mitad de la nada. Además pilla de camino si vais al Gobi del sur, el más famoso.
Al lado podréis encontrar, encima de una montaña a la que resulta muy fácil subir, una figura enorme de Buda recientemente construida. Al parecer el río que pasa por debajo (ahora helado) se había secado, así que construyeron ese buda para pedirle que volviera el agua.

Lugar que produce escalofrios en todos los mongoles. Durante la invasión rusa, en este lugar ocurrió una de las mayores tragedias del país. Los rusos, con su afán de derrocar el budismo y los lamas, atacaron este monasterio, que según nos cuentan era increíble, y asesinaron a decenas de lamas y redujeron el lugar a cenizas. Hoy solo quedan los cimientos de lo que fue uno de los monasterios budistas más importantes del país. Es un lugar sagrado para los mongoles y en su memoria sigue latente la tragedia que se vivió aquí.