Entre tanta hamburguesa pasta y pizza...
Entre tanta hamburguesa pasta y pizza como hay en esta zona del Arenal se agradece poder escoger otro tipo de comida. No es muy barato pero el trato recibido y la calidad de las comidas lo convierte en un lugar perfecto para saciar nuestro hambre.
El personal es muy atento, la decoración correcta sin ser demasiado llamativa, y siempre es curioso comer en un mejicano en mallorca regentado por alemanes.
Las cantidades más que correctas, un día pedimos un plato para compartir en el que iban 2 tortillas, y nos lo trajeron ya separado en dos platos, con guarnición doble, una sorpresa muy grata que luego no se cobraron, y es más, a pesar de no pedir postres porque estábamos muy llenos nos invitaron a un chupito. La chica que nos atendió era muy agradable y se estuvo esforzando toda la noche para hablar con nosotros en castellano.