Restaurante de alta montaña con folklore
En el hotel donde nos alojábamos, Molerite 1792 fue uno de los 2-3 restaurantes que nos recomendaron para comer y cenar bien en Bansko. Así que ya el primer día, optamos por cenar aquí. Este restaurante está situado en lo que se denomina como "Complejo Molerite 1792", que debe ser una especie de antigua casa de una familia de pintores bastante famosos de la ciudad, que con el paso del tiempo se ha convertido en un hotel de alta montaña con encanto. De forma paralela al hotel, en la planta de abajo, está la taberna y el restaurante. Con suelo y paredes de piedra y mil y un detalles en maciza madera, están ambientados con cierto estilo folklórico, dando la sensación de un bar-restaurante de alta montaña, cosa que particularmente me encanta.