Estupenda comida portuguesa
Belem es una vorágine de la masificación turística y cuesta encontrar sitio a la hora de comer, así que lo mejor es alejarse un poco de la zona de influencia. Este restaurante se encuentra un poco apartado, cruzando la pasarela que hay frente a la Torre de Belem. Aún así, es pequeño (8-10 mesas), por lo que te recomiendo que no llegues más tarde de las 13h (hora portuguesa).
Se trata de un restaurante de cocina típicamente portuguesa. Comimos estupendamente, todo buenísimo, raciones muy generosas y precio económico. Sopa (crema) de verduras muy rica, ensalada de pollo muy completa, y la picanha (carne de ternera) a la brasa espectacular. El plato principal venía muy bien acompañado con patatas chips (caseras), piña a la brasa, y arroz con frijoles y bacon.