Muy recomendable!!
Este restaurante nos llamó la atención mientras paseábamos por el casco antiguo a las 6 de la tarde porque ya estaba prácticamente lleno! Al preguntar en el hostal nos dijeron que es un restaurante de toda la vida con muy buena fama, fuimos esa noche a cenar y por suerte encontramos una mesa entre la gente, la carta es bastante cara, sobre todo las carnes y pescados así que pedimos para los dos una ensalada de ventresca de atún, 8 pintxos y una botella txacolí (vino blanco típico) todo estaba muy rico y nos costó 20€ por persona. Los embutidos tenían una pinta estupenda, en especial la tabla de