¡Qué ganas de volver!
Para los que no son muy amantes del sushi, ir a un restaurante japonés es casi una tortura. En mi caso, me encanta el sushi, (el más simple, una bola de arroz con el pescado encima) pero no soporto el alga nori, por lo que no como demasiado...
A pesar de esto, la idea de ir al restaurante Kyoto (situado entre las Alcaravaneras y Mesa y López) no sólo no me disgusta, ¡me encanta! El restaurante es pequeñito, muy acogedor, con una decoración bastante sobria (lejos de los típicos restaurantes chinos...) y nada recargada. El personal es muy amable.
Es muy conocido por sus menús de mediodía a muy buen precio (tan conocido que si llegas después de las 2 de la tarde, te costará encontrar mesa y te tocará esperar un ratito...), que te servirán en el famoso "bento", una bandejita con compartimentos llenos de comida a tu elección: sushi, gyoza (empanadillas), pollo frito con sésamo, arroz frito, ternera...