Restaurante El Hórreo
Atraco a mano armada. Es un chigre que cobra como un restaurante de súper lujo. El lugar no se aproxima para nada a un restaurante de lujo, sus mesas están apelotonadas, nada íntimo; los baños dan pena; el servicio bastante malo y, para colmo, el propietario fumando, sin pudor alguno, detrás de la barra. La materia prima es fresca, eso sí, pero cobrada en exceso. Las almejas a la marinera traen una salsa que nada tiene que ver con la marinera, sino más bien parece agua de lavar los pies, el tamaño de las almejas mezclado, pero cobradas como si fueran de oro. Pedimos un pescado que llegó pasado de plancha, más seco que la mojama, pero igualmente carísimo cobrado.