Guiados por las recomendaciones aquí descritas, hemos ido a comer y la verdad que gratamente sorprendidos.
Amplio menú con mucha variedad de carne y pescado. Un servicio rápido y atento. Y lo importante, todo estaba riquísimo.
El arroz caldoso estaba muy bueno, aunque mejor el bacalao. Y el postre, la tarta de la abuela claro está.
Fuimos dos adultos y dos niños (con lo exigentes que son...) un viernes noche de agosto; todos los platos riquísimos, el servicio perfecto y la relación calidad precio excepcional.
Ante la gran cantidad de platos disponibles (20 primeros y 20 segundos) resultaba difícil decidirse, de modo que volvimos al día siguiente y de nuevo salimos muy satisfechos.
Es muy aconsejable, ya que hasta el aperitivo que te ponen mientras esperas es delicioso. Las raciones muy generosas, la presentación muy cuidada, la variedad es de verdad, no simples variaciones sobre un mismo plato.
Cachopo, crujiente de zamburiñas y gambas, pastel de cabracho, solomillos al queso, arroz caldoso con almejas...
Muy bien, siendo Lastres un sitio de veraneo contaba con más precio y menos calidad, buen sitio para ir a comer o cenar, menú a 12 euros con mucha variedad.
Es un restaurante donde parece que te van a dar un cañazo por la buena pinta que tiene y sin embargo tiene dos menús uno de 11euros con un montón de platos a elegir y otro de 18euros que esta para chuparte los dedos el pescado fresco y jugoso bien presentado y buen trato merece la pena.
Siempre está lleno. No reservan mesa. Te atienden por orden de llegada. El personal es muy amable y atento.
Las cantidades son grandísimas. El local no es muy amplio pero acogedor. Es un restaurante para repetir.
Servicio excelente, comida buenísima, trato espectacular y un menú con muchísimas opciones y precio asequible, muy recomendable. Restaurante de 10 sin duda!
Es un sitio espectacular, llevó muchos años volviendo por la comida por el precio y por el trató recomiendo arroz caldoso chipirones plancha y puding de nuez
Increíble la atención, la calidad de la comida y el precio. Al llegar, el camarero nos pidió que esperáramos 15 minutos a que hubiera mesa libre, pues estaba lleno (buen síntoma) y en lugar de los 20 previstos fueron menos de 10. Fuimos con tres niños pequeños que compartieron dos menús de niño y aun así sobró comida. Todo exquisito y muy bien presentado: ensalada, chipirones a la plancha, cachopo, lenguado, croquetas,... Como pero, el lenguado a la espalda demasiado ácido y un pelín soso. De postre, recomiendo tarta de queso. Comimos los cinco por 39 €. Repetiremos.
No puedo hablar de todos los resturantes de Llanes, solo estuve un día, pero creo que tuve la suerte de ir a parar a uno de los mejores en Llanes, comida EXQUISITA, trato del personal, INMEJORABLE, AMABLES DE VERDAD, precio barato, menú 10,50€, pero tengo que decir que para mi el precio real habría sido por lo menos de 20€ por persona de lo bueno que estaba todo, en definitiva que de la semana que estuve en Asturias y Cantabria habría ido a comer todos los días.
Hoy 2 de marzo 2014 Estuvimos comiendo aquí muy muy bien menú de 11.50€. Pescado muy fresco salsa la justa , sangría exquisita hacia mucho tiempo que no nos preparaban una tan rica con buenos trocitos de variada fruta, amplio menú y postres la tarta de la abuela buenísima. Tienen amplio menú .
Estuvimos hace un par de días y fue una gran recomendación del mundo virtual. Por 10 euros (hay que tener en cuenta que aun estamos en temporada baja) había unos 25 platos a escoger entre primeros y segundos mas postre y bebida. Todo ello elaborado con calidad y variedad.
Recomendacion personal: la tarta de la abuela y la sangría
Bon menjar un menú de poc més de 10 euros. No demaneu arrós...Asturies és un lloc de carn i peix...el pitjor que els cambrers tenen bastanta pressa en que acabis i poder fer entrar més clients. Lloc recomenable.
Había mucha cola sin lista de espera, teniendo que esperar haciendo fila en la calle. El local aparentaba de buen gusto y, por el olor, con un menú buenísimo. Sería muy recomendable si gestionarán las reservas de tal forma que pudieras ir a tomar algo mientras esperabas.
