Mucho más que un restaurante
¿Sabes ésa sensación que tienes cuando después de haber pasado un buen rato charlando con amigos compartís una comida genial que corona el día?
Algo parecido es comer en Lezaun, que no es ni de lejos lo único que puedes hacer allí.
Nuestra visita tuvo un paseo en calesa por los viñedos de las bodegas, viñedos orgánicos que ocupan una extensión enorme de terreno y entre los cuales tuvimos un momentito para hacer una parada, verlos con calma, y después probar el vino que dan. Hacer una paradita bajo la sombra de un árbol a probar un vinito mientras te cuentan la dedicación que han puesto en que sea un vino genial es un momentazo.