Este restaurante me encanta, está ...
Este restaurante me encanta, está situado a las faldas del monte Jaizkibel, en plena naturaleza.
De decoración típica vasca, este caserío tiene una gran extensión de terreno donde tienen plantados viñedos, árboles frutales y olivos, que luego utilizan para elaborar sus riquísimos platos.
El dueño de este restaurante ha sido el primer productor de aceite de oliva de Gipuzkoa. ¡Vaya inversión más arriesgada, porque con todo lo que llueve en esta zona!
Es un restaurante típico para celebrar bodas, y puedo asegurar que tanto el servicio de mesas como la comida, son muy buenos. Además tiene unos jardines preciosos donde salen unas fotos muy chulas. Un parque infantl enorme enfrente, la única pega, que para llegar a él, los niños tienen que atravesar el parking.