manuela Filloy
Noches de verano increibles
Nada de especial, solamente sentados en una terraza con una temperatura ideal, una copa, el sonido del mar al fondo, sin ninguna prisa, con total relajación y una buena conversación.
Nada de especial, solamente sentados en una terraza con una temperatura ideal, una copa, el sonido del mar al fondo, sin ninguna prisa, con total relajación y una buena conversación.