Puerto de O Barqueiro

Al otro lado de la Ría de Ortigueira, luego de bordear el puerto de Ortigueira hacia el nordeste y atravesar pequeños pueblos pesqueros, la carretera desemboca en una entrañable aldea marinera: O Porto do Barqueiro, al resguardo de la ría del mismo nombre. Allí se vuelca al mar el magnífico Sor, un río que separa con sus aguas, sus barrancos boscosos y su agreste belleza a las provincias de Lugo y A Coruña. Al pequeño puerto le ha quedado el nombre de cuando no había puente para cruzar la ría; hasta hace un siglo, los ‘barqueiros’ en sus pequeñas barcas eran la única forma de transportar gentes y mercancías entre las dos orillas.

La capital del concello de Mañón es O Barqueiro, ubicado en el estuario del Sor, a los pies de la ría de O Barqueiro. Es un pueblecito marinero, en el que la población se dedica mayoritariamente a la pesca, generalmente de merluza y mariscos (coquinas y percebes). Podría decirse que la vida gira en torno a su puerto, las viviendas se disponen en cuesta (como subiendo por la ladera) en torno la ensenada que forma el puerto.

Pero dada la afluencia de turistas que poco a poco va cobrando la localidad, O Barqueiro se va adaptando poco a poco para dar servicios a los visitantes; ya hay varios hostales, restaurantes y cafeterías.

Un lugar muy bello en la desembocadura del río Sor. Una playa casi virgen pero..., las corrientes son muy peligrosas. Para comer, cualquier sitio es bueno. Esta localidad ofrece al viajero multitud de productos gastronómicos, pero os sugiero que probéis las almejas o las coquinas. ¡Os chupareis los dedos!.

Tiene poquitas barcas y casi todas de particulares que suben y bajan el río para pescar.

Frente a este puerto encontramos, al otro lado del río Sor, el camino a O Vicedo.
En el puerto también podemos encontrar a los lugareños del pueblo pescando.

Pero en la entrada del puerto, en las cuestas es sencillo. Y no hay muchos restaurantes para elegir, pero el que elijas seguro que tiene buena comida y marisco barato. Con una chaqueta por si acaso, pero tienen terrazas cubiertas. Un paseo precioso por el puerto.

Hay que ir a este puerto pesquero aunque no sea más que para comer coquinas, una delicatessen de este pueblo, aparte de lo bonito que es.