Pueblo de Tollos

Que bonito el pueblo de Tollos! A mi que me gusta echarle un vistazo a los pueblos desde la lejanía antes de llegar y después cuando me marcho, desde la carretera; diré que Tollos, no muy agraciado en estas panorámicas, me sorprendió gratamente una vez entré. No solo por sus callejuelas, epinadas, retorcidas, decoradas con plantas y flores o por las maravillosas vistas de los picos más altos de la sierra de la Serrella, justo enfrente del pueblo. Sino por sus gentes, "especiales y espaciales", como decía mi amiga Lucrecia. Me tropecé con tres señoras a lo largo de mi visita al pueblo, con ellas tuve el gusto de poder pasar unos ratos impagables, en donde me contaron su historia, unida a la del pueblo y sus familias y a la de la comarca.