Colores, olores y sabores
Está sobre un prado florido (de ahí su nombre). En 1456 el papa Calixto III hace pavimentar la zona como parte de un proyecto en el que edificios importantes debían ser construidos en las inmediaciones, como el palacio de la familia Orsini, lo que atrajo un floreciente mercado de caballos y que se activara la actividad comercial en la zona.
Este animado mercado se celebraba anteriormente en la Piazza Navona.
Ahora es una de mis visitas preferidas en Roma.
Preciosas flores, verdulerías de exposición, productos típicos y animadas terrazas es lo que encontrareis.
Ir a comer a la Hostería da Fortunata y comprar tomate deshidratado, funghi porcini y queso parmesano y gorgonzola en la salumería de la esquina, no puede ser mejor plan para una soleada mañana.