Pésimo
Pedí dos pizzas familiares para recoger en el restaurante. Tras llegar al restaurante me tuvieron esperando 45 minutos sin darme ninguna explicación e ignorándome.
No era el único en esta situación, había una extranjera que no hacia mas que gestos y señales y la ignoraban también. Iba con tres niñas y mi mujer y se tuvieron que ir por el plantón. Mientras podía ver a los camareros desbordados y despotricando, de mal humor.
Hay personal pero están muy mal coordinados y tienen pocas ganas. Cogen muchos pedidos y masifican el local y luego no pueden atenderlos. Lo peor de todo fue los malos modos de la que parece la jefa que se limito a cobrarme los 30 euros de muy malas maneras.