Antoine D'Audigier
Concentrado de pureza
Este restaurante indonesio es un concentrado de pureza. Su política principal: todo es natural, desprovisto de cualquier sustancia química. Sus platos son sabrosos y las bebidas - tan naturales como el resto - refrescantes y ricas.
El mayor plus, es la vista que se extiende por los campos de alrededor, de donde se supone que vienen los productos. Un plato medio cuesta entre 35 y 45 rupias. Básicamente, se come por dos euros y algo. No es caro para ingredientes semejantes.
Hay que visitarlo para relajarse, para degustar.