Un lugar muy interesante para aprender
La micología es otro de los grandes encantos que tiene la comarca. Y en Molinicos, al ladito de la plaza del pueblo que se hizo protagonista en la película surrealista “Amanece, que no es poco”, se encuentra este museo del Nízcalo en el que se ha creado un espacio especialmente pensado para los más pequeños y en el que se puede aprender muchísimo de las setas. Juegos, explicaciones, películas… Un lugar muy interesante para aprender divirtiéndose y un lugar único en el que poder asomarse a ese balcón en el que, en la película, se asomaba el alcalde para dar esos pregones tan peculiares.