Museo del Ferrocarril

El museo del ferrocarril se sitúa en la plaza de la estación del norte, en los terrenos de la antigua estación, frente a la nueva Playa de Poniente. Se inauguró en 1998 y la temática, evidentemente, es el mundo del ferrocarril en Asturias: Su construcción y financiación, su utilización, y la repercusión que tuvo en el desarrollo de las ciudades asturianas.

La visita al museo consta de varias zonas:
-El propio edificio de la estación, donde se encuentran las oficinas, salas de exposiciones temporales y el centro de documentación.

Corría la segunda mitad del siglo XIX, y el Gijón fabril, industrial y obrero crece sin cesar. Elemento clave de este crecimiento son las comunicaciones y el transporte, y en este contexto nace la Estación del Norte, que transforma el entorno rural y tranquilo de El Natahoyo en uno de los arrabales proletarios más relevantes de la ciudad. La zona, limitada por el ferrocarril y el mar, y vertebrada por la carretera de Candás se convierte en lugar de asentamiento de numerosas industrias, entre otras algunos de los astilleros más importantes del siglo XX español.
El ferrocarril permitiría la salida al mar de mercancías industriales, y el tránsito de pasajeros por el eje central de Asturias, desde Gijón a las cuencas mineras y viceversa. En definitiva vertebraba la vida, la economía, los cambios sociales y la revolución industrial, fue un símbolo de progreso y conocimiento.

Un museo que encanta a niños y mayores a partes iguales, encontrarte nada más llegar con esas locomotoras tan impresionantes dándote la bienvenida ya le dan a uno ganas de más. Tienen hasta un vagón del antiguo tranvía que circulaba por Gijón e incluso el edificio es un buen ejemplo de cómo aprovechar la antigua estación para museo ha sido todo un acierto. Distintos tipos de locomotoras y vagones, fotos antiguas, maquetas y todo tipo de piezas y utensilios utilizados en el ferrocarril. Tienen por el año las ya famosas Jornadas del Vapor, en las que te puedes subir a un tren antiguo en funcionamiento, exposiciones temporales y alguna jornada culinaria como las “Ollas Ferroviarias” en las que realizan guisos como antiguamente los hacían los operarios del tren.

A quien le gusten los trenes no debe dejar de visitar este lugar, maravilloso. Además el segundo fin de semana está el mercado de motores y es increíble el ambiente que hay ...

Un museo precioso para ir con niños, y disfrutar la visita, hay muchas cosas que ver, tienen exposiciones temporales, e incluso organizan los días del vapor, en los que puedes recorrer un corto tramo en un tren de vapor. Ver locomotoras de vapor de coleccionista. Un museo ideal para ir a pasar la tarde con los niños, quedrán repetir la visita, seguro.

Algunos días ponen en funcionamiento máquinas de vapor y en Navidad hacen un mercadillo que es cita obligada.

Un Museo en mi opinión de los mas importantes de Gijón dada su historia y su importancia que tenia antiguamente en la ciudad, con material histórico importante en el ámbito del ferrocarril.