Una de las visitas obligadas
Sin duda ésta es una de las visitas obligadas en la capital leonesa. Es una de las obras románicas más importantes de la península, y está declarada Monumento Histórico desde 1.910.
El templo fue construido en el siglo XI por orden de Fernando I y su esposa Dª Sancha, y ampliado posteriormente por su hija Dª Urraca y sucesores. Consta de tres naves y tres ábsides en la cabecera. Lo más destacable de la fachada es la puerta principal de acceso a la colegiata, dedicada a los peregrinos y denominada Puerta del Cordero, por la iconografía que tiene el dintel, flanqueada por las imágenes de San Pelayo y el rey David, además de los signos del zodiaco. Está culminada con la imagen de San Isidoro montado a caballo.