El monasterio Antim es uno de los pocos...
El monasterio Antim es uno de los pocos edificios que queden de la época antes de la dictadura en este barrio, cerca del palacio del parlamento. Con el pretexto de querer construir por ahí el “centro cívico “ de la ciudad alrededor de su palacio, el dictador Ceaucescu mandó a destruir la mayoría de las pequeñas casas que había en la zona. Entonces el monasterio aparece como algo fino y delicado en medio de edificios gordos y sin alma.
Originario de Gergia, Antim Ivireanul era en el siglo XVII un artista multi talentos y muy educado. Pintor calígrafo y escultor, también era hombre de Dios. Primero fue obispo de una metrópolis, que es el equivalente de una catedral católica, la iglesia más grande del distrito, y luego hizo construir esta iglesia con el mismo estilo que las de Constantin Brancoveanu, del cual era consejero cercano.