Buen hotel con algún detalle
Este es un hotel diferente.
Un antiguo Sheraton, que pasó a la cadena Eurostars, pero conserva parte de los elementos de la antigua cadena, que le dan un valor añadido.
Tiene muchos puntos fuertes: todas las habitaciones son suites, hasta las más básicas, y como mínimo tienen 60 m2. Eso hace que sean comodísimas y amplísimas. Hay una zona de entrada con doble puerta hacia el baño y hacia una zona de oficina con mesa de despacho, mesa de comedor y pequeña cocina (ahora deshabilitada).
De ahí se pasa a una zona común con sofá y mesita auxiliar, y haciendo una ele a la genial cama king size. De ahí hay puerta al baño, dividido en 3 zonas (es el único hotel donde hemos visto esa división, normalmente el baño o no estaba dividido o lo estaba en 2 zonas, pero aquí tenemos la zona de lavamanos y armarios, separado de la zona de bañera y ducha (las 2 cosas) por una puerta, que a su vez da a la zona de wc con otra puerta). El efecto es muy espacioso y lujoso.