Maria José Girón
Una vista de muerte
Este mirador se ubica encima del cementerio de Olvena, situado en la parte más alta de la peña, en un punto tan escarpado, que es fácil comprender por qué solía decirse que los muertos mataban a los vivos.
Asomados a este balcón privilegiado, se abre a nuestros pies el magnífico congosto de Olvena (etimología: "oliva buena"), impresionante formación cuyas crestas parecen serpientes dormidas. Tras nosotros, el pueblo se encuentra a buen recaudo bajo la mole que coronamos, y más allá se abre el Somontano de Barbastro, amplio y fértil.