Milwaukee Riverwalk

El centro urbano de Milwaukee sufre del mismo problema que muchas otras ciudades norteamericanas: Es un puro centro de negocios. A partir de las 5 de la tarde y en días festivos, no se ve un alma por la calle. Sólo hay indigentes y coches de policía patrullando. Para el turista, es frustrante ya que no hay mucho que hacer salvo patear algún centro comercial semi-desierto o comer en los pocos restaurantes abiertos.

La única excepción es la zona del Riverwalk, un paseo habilitado recientemente junto al río que recorre la ciudad y que lleva su mismo nombre. El paseo, un sistema de terraza y pasarelas, cubre varios tramos del río, pero el más agradable y frecuentado es el que se encuentra en el downtown. Allí podremos encontrar varios bares con terracitas (en verano, claro está) y cervecerías que hacen honor a la tradición cervecera de Milwaukee. También hay varias manifestaciones de arte urbano. A mí hijo le gustaron mucho unas esculturas que recuerdan a una familia de patos que vivió en esta parte del río...

Fui en septiembre de 2016. El restaurante- pub está en un callejón y es fácil identificarlo porque hay unas lamparitas encendidas tanto de día como de noche. Nosotros, al entrar, nos encontramos con una chica que, después de pedirnos un ID (DNI) nos preguntó por la contraseña. Al no saberla, nos hizo bailar a lo ruso unos minutos para darnos el pase.

El local está bien ambientado con fotografías y pósters de películas de espías. Incluso hay una escenificación del Check Point Charlie. Recomiendo que antes de sentaros, deis una vuelta por todo el local para poder apreciar todas las pequeñas atracciones que tienen montadas.