Un bello lugar
Un precioso pueblo, dar un paseo por sus estrechas calles, sus muy cuidados jardines o sentarse en uno de sus muchos soleados rincones hacen que el visitante se sienta parte del entorno. La sensación de paz que desprende el lugar hace que las horas pasen sin darse cuenta... Debéis visitarlo, os enamorará. Desde su Ermita podréis disfrutar de unas vistas espectaculares de la Costa... Realmente un bello lugar. Me ha llamado mucho la atención el cuidado de sus jardines y la cantidad de ellos que hay.