Mi Viejo Pueblito

Manchamanteles, un platillo típico poblano, fuera del mole y las chalupas, una mezcla de plátanos fritos con carne de cerdo y una salsa un tanto picosa; nada para estómagos débiles. Más bien un tanto aventureros y con ganas de probar algo diferente. Y lo mejor?, la vista del restaurante, justo frente a la catedral, a la plaza y a los pórticos coloniales del centro de la ciudad. Es Domingo y las personas atestan las calles, un día entre semana es más tranquilo para caminar estas calles llenas de iglesias. Y si buscan un buen lugar para comer, este es uno de ellos, uno de los tantos restaurantes típicos que el centro tiene para ofrecer.