Sergio
Una parada en el camino.
Desde luego que sí, una parada en el camino merece la pena. Es el típico mesón de carretera, rodeado de un paraje espléndido. Eso sí, prepárate para comer de forma abundante y no muy caro. Estuvimos tomando un cochinillo riquísimo, aderezado por vino Yllera. El único problema que tiene es el parking, puesto que se queda completo en poco tiempo, y es que el sitio es muy conocido en la zona.