Un sábado en el Puerto
Un día decidí tomar la cámara y tomar fotos en un día como cualquier otro, no era una fecha especial ni nada por el estilo, pero además del intenso calor que se siente todos los días, era un tanto especial puesto estaba nublado con una luz muy característica, mirando el atardecer al saber la fortuna de haber llegado hasta aquí, fue un buen día, donde los artistas daban gala de sus talentos para el deleite de los turistas y los locales, que, siempre han estado fascinado con el lugar en el que viven. Un día que empezó tomando un helado y que terminó en una modesta cena en unos de los varios restaurantes que hay en la ciudad.