Los elefantes del templo Kamakshi Amman

Una de las grandes sorpresas del sur de India, para mi, fueron los elefantes... en el viaje que hice por el Norte, años antes, no había visto tantos ni tan integrados en el día a día de las gentes de allí. Pero en el sur la cosa cambia. Los ves por las carreteras, con sus dueños o cuidadores, y sobre todo en los templos. Muchos templos tienen uno o dos elefantes en la puerta, dispuestos a bendecirte con su trompa, toda una experiencia, os lo aseguro, ja, ja!!
La primera vez que los vimos, en el templo de Kamakshi Amman, en Kanchipuram, cerca de la costa este de India, alucinamos...
Observamos cómo los locales que acudían al templo (por allí no había turistas, por cierto), se acercaban al salir con una moneda en la mano. Tendían la mano, y el elefante se la llevaba y se la daba a su cuidador, un joven que estaba allí al lado, presto con una vara en la mano (supongo que por si el elefante hacía algo que no debía), y después el elefante volvía para tocar suavemente la cabeza inclinada del donante, en lo que por lo visto es una bendición.

Nada más entrar a este majestuoso templo encontramos a la izquierda el elefante más bonito que uno pueda imaginar. Y no solo por como estaba pintado, también porque el animal era de una tamaño medio y el color de su piel era muy uniforme. Me acerqué cámara en mano para sacarle una foto mientras veía a los fieles dejar dinero a sus pies y ser luego "bendecidos" por la trompa del animal. Pero su cuidador me miró con cara de muy pocos amigos y me dijo algo que no entendí, así que mantuve la distancia, pero hice fotos.