Entre dos mares
Las charcas es un paseo que corre desde San Pedro, por una "mini-Manga", hasta tocar casi con los dedos la otra Manga, la del Mar Menor. Es más conocida por el "Paseo de los molinos", siendo estos, los molinos de Quintin y el de Calcetera, los que acotan la parte del trayecto más transitable.
La longitud de dicho paseo es de casi 5km, de punta a punta, es decir, desde la zona de población hasta la zona más salvaje de la playa la Llana. Se divide en tres sectores: Uno el más marítimo, con calzada adecentada para el caminar de cualquier persona, sea cual sea su preferencia o limitación, correctamente iluminado y con accesos al mar donde se puede practicar algún deporte. Los bancos que se intercalan por la ruta estan siempre llenos de gente que se para a descansar antes de la caminata o después de ella, también desde ellos pasan horas observando el magnifico paisaje que se abre ante sus ojos (fotos). Este primer trayecto es el conocido como el de los molinos, explicado anteriormente. Seguidamente, y tras pasar una antigua y derruida barrera tipo aduana, entramos en el segundo trayecto. Éste ya no está tan bien cuidado y su anchura se acorta considerablemente, es el conocido como: las charcas, ya que pronto se empiezan a divisar la diminutas charcas y pequeñas isletas, algunas de ellas de algas compactas y solidificadas que van salteándose hasta quedar a escasos metros de la Manga del mar Menor. Es el trozo que recorres con más desesperación, ya que ves como vas dejando atrás el pueblo sin divisar el final; te sientes solo y perdido, sin saber si seguir o retroceder. A los lados, las salinas, la zona de barros y lodos y la parte más alejada del Mar Menor.