Las cascadas de Karfiguéla

KARFIGUELA
Cerca de la ciudad de Banfora y atravesando enormes campos de caña de azúcar, llegamos a las Cascades o Chutes de Karfiguela, uno de nuestros lugares favoritos para ir de excursión y hacer un buen picnic, tomar el sol y darnos un bañito. El paseo empieza en una gran poza a los pies de las cascadas y tras una escaladita de 15 minutos llegamos a la cima. La subida no es complicada porque hay escalones excavados en la roca y es lo bastante fácil como para ir cargados con una buena merienda!
El premio es una vista espectacular de la meseta y un spa natural lleno de frescos chorros de agua y pequeños jacuzzis.

Nos encontramos en pleno corazón del país de los Senufo y de los Lobi, tierras en las que la naturaleza se nos muestra en todo su esplendor, tierras en las que la vegetación tropical se sobrepone a las inmensas llanuras gracias al aporte de los ríos, tierras en las que el Sahel languidece, tierras dominadas por los espíritus de la naturaleza, tierras animistas por lo tanto..

En este maravilloso entorno y no muy lejos de la ciudad de Bánfora la naturaleza nos regala la visión de un hermoso salto de agua, se trata de la cascada de Karfiguéla. Sus alrededores y a pesar de la presencia de cocodrilos, son frecuentados por intrépidos bañistas que aprovechan la belleza del lugar para darse un buen chapuzón y tomarse algún refrigerio.

Si no me equivoco, son estas mismas cascadas... No pudimos detenernos, aparte de una pequeña parada en carretera, pero desde luego el paisaje, muy verde, en la plenitud de las lluvias, era realmente precioso.