Una Cervecería-Tapería muy agradable
Este establecimiento se encuentra en Majadahonda, justo enfrente de la Parroquia de Santa Catalina Mártir. Se trata de un lugar bastante grande que organiza bautizos y comuniones, supongo que por la proximidad a la Parroquia. Sin duda no es un mal sitio para una celebración de ese tipo ya que nos queda al lado.
Los precios son fabulosos y la atención al cliente inmejorable. Para que os hagáis una idea el café te cuesta tan sólo 1 euro, algo cada vez más difícil de encontrar. El local a pesar de ser grande resulta muy acogedor por el diseño que tiene, separado en diferentes zonas. La barra es bastante grande y ocupa la mayor parte de la parte central, va haciendo quiebros y es muy cómoda para tomar algo rápido, es raro no tener sitio y las banquetas son muy cómodas.