Sandra Prieto Sanchez
Ha sido uno de los hostales más preciosos en los que he estado nunca.
Justo en el corazón De Jerez de la Frontera, en la calle Bizcocheros. Una fachada preciosa blanca que esconde detrás una serie de mini apartamentos de colores dignos de ver.
Y una terraza superior dónde desayunar, tender la ropa o simplemente descansar en una de sus tumbonas. Además el trato de las chicas que lo gestionan es estupendo