La noche salmantina

La noche en Salamanca está pensada para todos los públicos, desde las fiestas en las dicotecas para gente joven y de gran ambiente universitario, donde te lo puedes pasar bien en un ambiente internacional, a visitas turísticas nocturnas, donde se puede apreciar todos los monumentos desde otro punto de vista.

En general los principales reclamos como las dos catedrales, con las que contamos, la clerecía y la universidad, gozan de una gran iluminación que permiten a los turistas y charros que entran a Salamanca contar con unas vistas inigualables.

Yo recomiendo cruzar el puente romano, hasta la otra ribera del Tormes para poder disfrutar de una buena panorámica nocturna, si a estos encantos le sumamos que nos encontramos en fiestas y podemos coger sitio en primera fila para ver los fuegos artificiales, conseguiremos que algunas instantáneas sean recordadas durante toda nuestra vida.

Salamanca es una de las ciudades más bonitas no sólo de España, sino de todo el mundo. Pasear por sus calles es como ir por un museo, donde a cada paso te vas encontrando con auténticas joyas que te dejan embobado.
A mi me encanta pasear por las ruas y por la plaza mayor de esta ciudad, y me encanta hacerlo sobre todo por la noche, porque la belleza de Salamanca aumenta más si cabe en cuanto se pone el sol.
La ciudad posee una iluminación por todo el centro realmente increíble que hace que los monumentos, la catedral y las iglesias parezcan una obra divina. Es como si estuvieras caminando por una ciudad de un cuento de hadas y en cualquier momento te podrías encontrar con personajes de ficción como el Lazarillo de Tormes.

Un paseo nocturno por la ciudad de Salamanca de España.

Por la noche las luces y sombras se complementan perfectamente para crear arte en la ciudad.

Estupenda iluminación de la catedral, contrastada con con la luz de la luna