Barcelona a tus pies
Si tuviera que decidirme por un lugar entre los que componen la mágica montaña de Montjuïc, cosa que es harta difícil ya que todos son excepcionales, creo que me quedaría con este. De una belleza paisajística y ornamental diferente a lo que nos acostumbra Barcelona. Lo que nació como primera rosaleda pública, con el tiempo ha acogido uno de los marcos incomparables de la ciudad condal: El Festival de verano El Grec.
Perderse en este lugar, olvidarse del tiempo, sentarse en sus bancos, deleitarse con la ciudad a tus pies, embriagarte de las plantas aromáticas o disfrutar, en verano, de uno de los iconos del Festival de verano barceloní. Todo esto esto nos deparan los jardines del Teatre Grec. Todo???, no. Os dejo una sorpresa para el final, el nombre de los jardines, Teatro Griego (en castellano) deriva de la ubicación en su interior de un espectacular teatro que es copia del de Epiduro en Atenas. El rincón es único, y uno no para de preguntarse cuantas sorpresas esconde Barcelona más allá de las empachantes y sempreternas y turísticas Ramblas.