Iglesia de San Juan y San Nicolás

Después de descansar, nos dirigimos hacia el casco antiguo de Portomarín, para ir a la Iglesia con nuestras cartillas listas para el sello, que nos acreditará que hemos estado allí.
La Iglesia de San Nicolás, antiguamente se llamaba iglesia de San Juan de Malta, y un detalle curioso, es que fué trasladada piedra a piedra desde su antiguo emplazamiento. Si nos fijamos, todavía se puede ver la numeración de alguna de las piedras....Aunque según nos explicaría Tina (nuestra experta en arte) también podría deberse a la numeración que ponían los canteros para poderlas cobrar.
La Iglesia es de estilo románico de los siglos XII y XIII. La puerta principal posee un tímpano en el que se ven los 24 ancianos del Apocalipsis rodeando al Salvador.

El carácter guerrero de los monjes de las dos márgenes del río en este lugar (de un lado los caballeros de la orden de Santiago, y del otro los de la Orden de San Juan de Jerusalén), indican que en la edad media este lugar debía tener una gran importancia estratégica que había que proteger. Este mismo carácter guerrero se refleja en la marcada austeridad y el aspecto de fortaleza de la iglesia de San Juan de Malta (o San Nicolás).

Como os había dicho, la iglesia románica (XII-XIII) fue trasladada piedra a piedra para que no quedase oculta (como el resto del pueblo) en el nuevo embalse; y hoy, todavía las piedras conservan su numeración.

Su mayor importancia reside en que se encuentra en el antiguo Camino de Santiago Francés. Se situa en el municipio lucense de Portomarín, famosa por su fábrica de tartas de Santiago y por la fabricación de afamados orujos gallegos.

La primera iglesia originaria era la de San Juan, pero todo el mundo la llama de San Nicolás al estar ubicada en el Barrio de San Nicolás. Como la iba a anegar un pantano debido a que se sabía que se iba a construir, se trajeron todas las piedras y fue reconstruida piedra a piedra.

Destacan sus dos rosetones que iluminan el interior de la iglesia.

Lo más curioso de este “templo-fortaleza” es que fue reconstruido piedra a piedra en su ubicación actual cuando se hizo el embalse de Belesar (que propició que se sumergiese el puente romano cuyas ruinas sólo se divisan cuando el cauce del río está bajo) en los años 60.
Los dos rosetones de ambas fachadas rompen un poco la rigidez “militar” que le confieren los muros rectos y las almenas.

También se le llama San Juan de Portomarín porque pertenecía a la orden de San Juan de Jerusalén. Desde los alrededores de este templo románico hay unas vistas estupendas porque la función de esta iglesia- fortaleza era controlar el puente que atravesaba el Miño...

Una vez hayas terminado tu etapa del Camino de Santiago que converge entre Sarria y Portomarín, puedes visitar la majestuosa iglesia de San Nicolás, firme y robusta preside la plaza central de Portomarín. Reportaje fotográfico completo en 'https://www.fotonazos.es/2010/08/iglesia-de-san-nicolas-en-portomarin/'

Dentro de la provincia de Lugo y camino hacia Santiago de Compostela, vale la pena detenernos unos momentos a visitar el poblado de Portomarín, y en especial su Iglesia de San Nicolás.
Este poblado cobró significativa importancia luego de que Pedro Peregrino construyera un puente sobre el río Miño como también un hospital en el año 1120 aproximadamente.
La Iglesia de San Nicolás fue construida posteriormente, durante el siglo XII y se encuentra fuertemente relacionada con la Orden de Santiago.