Una de las once torres
Son varios los tesoros que tiene la iglesia de San Gil, en Écija. Uno de ellos, el más llamativo, es su preciosa torre barroca, levantada sobre la anterior que quedó totalmente destruida tras el terremoto de Lisboa de 1775. Aprovecho para no dejar pasar la oportunidad de contar la leyenda de las torres de Écija, que relata como la ciudad, que era tenida como una hermosa mujer, estaba enamorada del Sol. Ella quería tenerle tan cerca que recurrió a un pacto con el diablo al que prometió la construcción de doce torres a cambio de su alma. Cuando estaba a punto de concluir la construcción, un rayo caído en 1892 sobre la torre de Santa Bárbara, enviado por el Creador, castigó a la ciudad-mujer y la obligó a colocar en cada torre una campana para general conocimiento de su vanidad y malas artes.