Ibones de Alba (Valle de Vallibierna)

El Ibón de Monte Alba es de los más espectaculares de esta parte del Pirineo Aragonés. La ruta comienza en los Baños de Benasque a los cuales se puede acceder con facilidad en coche. Hay un buen aparcamiento y es un lugar muy conocido ya que desde aqui se inician varias rutas. La más complicada y dura es sin duda la del Ibón de Alba. La primera parte del camino transcurre remontando un río hasta llegar a una pequeña cascada, salvarla es complicado y presenta fuertes pendientes. Una vez pasada esta zona el camino es más sencillo, transcurre por un tranquilo valle lleno de marmotas y luego subiendo todo el rato se llega al Ibón.

La aventura del verano: Junto con un amigo hemos subido 4 tresmiles (en pirineos) en 5 días y este se llevo la palma. El mítico Aneto 3.404m techo de la península es duro y muy muy bonito, es mas lo comercial del nombre y la altura que otra cosa, no deja de ser majestuoso, pero el pico Vallibierna Culebras, es mas, la ascension es de un grado de disfrute para el ser humano insuperable, unos acantilados, unas llanuras, unos lagos, en definitiva unas vistas, que en una foto no se puede plasmar las sensaciones que despierta lo que ven tus ojos, pero en la que muestro algo se puede captar. Sin mas

Cuando circulamos por la Ctra 230 dirección Vielha, poco antes de llegar el túnel conocido por el mismo nombre, encontramos un desvío que nos lleva al pueblo de Aneto. Una vez llegado al pueblo encontramos un cartel que nos recuerda que estamos en un parque natural. Concretamente en el Posets-Maladeta, en su extremo mas oriental. Seguimos la carretera que nos lleva al embalse de Llauset. Una tarde de primavera, nos dirigiamos a pasar una tarde por el poco conocido valle de Llauset cuando nos sorprendio una tremenda tormenta. Todos sabemos que después de la tormenta llega la calma y esta nos brindó

La enorme belleza de este valle me resultó impactante, más aún al contemplarlo desde lo alto con los enormes lagos glaciares al fondo como a punto de dejar caer sus aguas montaña abajo. Los contrastes de colores en un día claro, con ese azul tan intenso dando brillo a la roca y el blanco frío de los últimos glaciares que aún sobreviven. El río Vallibierna en su recorrido por una garganta a más de 200m. De profundidad. Impactante de verdad.

Perderse por el Valle (ubicado en la zona central del Valle de Benasque) a través de los caminos que nos conducen a alguna de las excursiones es todo un espectáculo y un deleite para los sentidos.