Maria Merino
Hotel anticuado, muy descuidado
Lo único cómodo son los colchones, el 90% son personas mayores, las piscinas abarrotadas y el circuito termal que pagas aparte, un timo, 3 piscinas una con chorros fuertes, otra con chorros menos intensos y la otra relajada, y una sala de vapor, a mitad del circuito te traen una jarra con "limonada" y fruta que es piña y melocotón en almíbar. Jamás volveremos.