perfecto
He estado una semana esquiando en Formigal, alojando en este hotel. Salvo alguna cosa mejorable, como las camas, el resto de cosas perfecto:
- desplazamiento a la estación a primera hora y vuelva cuando terminas de esquiar. En total hay que andar 50 metros hasta que estás en la nieve, muy de agradecer ya que andar con las botas no es agradable precisamente.
- pegarse un baño relajante después de llegar de la estación en la piscina exterior no tiene precio.
- la calidad de las cenas es realmente buena.
- las vistas